Me gustan las infusiones de hierbas y colecciono “tés” de todo el mundo. Por supuesto que los chinos van a la cabeza y allí hay tés e infusiones que en mi vida voy a probar, pero a cada persona que viaja le pido que me traiga algo.

El té o las infusiones son muy buenas para el organismo. Por ejemplo, veamos hoy las virtudes del té de menta. Propiedades ya probadas.

• Alivia el estrés: ¡qué bueno! Con los tiempos que corren no es cosa de andar tomando pastillas todo el tiempo. Deberíamos acostumbrarnos a infusiones relajantes, por lo menos para aquietar un poco la mente. El mentol es un relajante muscular natural y beber un té de menta antes de irse a la cama proporciona más chances de tener una noche en paz.
• Alivia la sinusitis: en el hemisferio norte han comenzado los días fríos que traen resfriados y gripes así que pueden empezar a beber todos los días un té de menta, por las noches. Limpiará las vías respiratorias y suavizará la garganta ya que la menta es un descongestivo natural.
• Perdida de peso: la menta puede funcionar como supresor del apetito, lo mismo que el té verde, mejorando el metabolismo.
• Alivia los problemas de estómago: algunos alimentos resultan problemáticos de digerir y terminan con gases y demás. Una taza de té de menta por las noches antes de irse a dormir ayuda a la digestión y por ende, a conciliar el sueño.
• Limpieza de cutis: cuando uno tiene cambios hormonales la piel se resiente, pero está comprobado que el té de menta acciona sobre el nivel de estrógenos en algunas personas, así que podría ayudar a quienes padecen acné. La idea es agregar té de menta al agua del baño.